En entrevista con El Financiero, Rogelio Jiménez Pons, titular de FONATUR, señaló que lo recaudado por las obras del tren maya, serían destinadas para la sostenibilidad financiera del sistema de pensiones de las fuerzas armadas, sin embargo, dicha información se tergiversó.
Con esa declaración, circularon notas, señalando que todas las ganancias serían para los militares sin pasar por la secretaría de Hacienda, sin embargo, Jiménez Pons aclaró que no sucederá como lo plantean.




Y esto en lugar de generar controversia con la población, generó que la misma gente diera sus puntos de vista de por qué es una buena idea que la SEDENA se encargue de las obras:
- Para evitar una privatización del proyecto por futuros expresidentes.
- Destinar mejor los recursos.
- El ejército ya no es un poder bélico. Por lo que la inclusión en la construcción de obras públicas, ayuda también a pagar su salario.
- Rapidez y eficacia en la construcción de obras.
- Ahorro en la inversión y el pago de salarios.
Aclarando las dudas
De acuerdo al titular de FONATUR, en entrevista con Adela Micha, se está apostando por la rapidez de la construcción que pueden aportar los ingenieros militares, abogando también a la disciplina que profesan los soldados.
Y es que son precisamente los militares quienes son considerados como lo mejor que hay en el país hablando de medicina e ingeniería, no por nada, miles de jóvenes buscan entrar a la academia militar para estudiar esas ramas.

No solo eso, como bien lo señala el propio Rogelio Jiménez, el ejército no está entrando en conflictos bélicos, por lo que es más que viable hacer uso de ese recurso, que también aporta u ahorro en el coste de los salarios y la inversión de la obra.
Es destacable la importancia del personal de la SEDENA en programas como el plan DN-III usado en contingencias y desastres naturales, así como la capacidad de construcción de otras obras como el aeropuerto de Santa Lucía.
Rogelio Jiménez Pons, dijo además que se estima que el tren maya inicie operaciones en 2023.